Caida libre


Hoy no tenia tiempo, pero me lo he hecho y me he nutrido de una incalculable cuota de ilusión, yo, que de eso ya andaba bajo, me he paseado de mundo en mundo, de universo en universo y he descubierto oasis asombrosos. Xovi, Romina: ¿Por que nunca me hablaron de Eduardo??? Me intriga “Avellaneda” y “bajo un sol forastero” me intriga “El”, no por lo que son o pueden ser, sino por lo que lograron producir…
No soy profundo ni emocional, nunca lo he sido, “el otro” lo fue, pero sufrió mucho, por eso lo tuve que matar cuando vine a Santiago, que coincidentemente fue el mismo día en que yo nací. Lo malo es la herencia que me dejo y que yo no quiero, pero que tengo enraizada en mi como si yo fuera la encía y la herencia la muela del juicio. Y es a eso a lo que temo, a mi juicio, por que con la vara que mida seré medido y yo no soy generoso para medir, siempre doy más soga de la que conviene, pero de la manera más egoísta posible y por dar y dar cuerda, en lugar de dar libertad, termino ahorcando y yo no quiero que a mi me ahorquen, solo que me cobijen, pero estoy tan lejos de cualquiera…
Yo creo que mi risa ahuyenta a todos, nadie se acerca a quien se ve feliz, temen contagiarse con su locura, pero que tontos y ciegos son, con que facilidad se dejan engañar por un mal disfraz…
Lo ven, soy exigente al juzgar y me quejo de todos ¿Cómo se quejaran todos de mi? Quiero sacar el tronco de mi ojo y no me importaría dejar de ver la paja en el ajeno. De hecho, no la quiero ver. Quiero hacerme el ciego con los defectos de los demás como lo hago con los míos. Quiero ser bueno y generoso, pero no lo logro. ¿Será que no es mi naturaleza? Y ¿Cual es mi naturaleza si muchos opinan que yo mismo soy antinatura?¿Por qué siempre me he de dejar llevar por los sentidos y no por los sentimientos? ¿Por que mi gozo siempre va unido a la culpa o perjuicios de otros?
Parece que fui hecho para el pecado y para pecar y no me siento orgulloso de eso, pero es solo que así me toco vivir ¿o lo elegí? No, yo no lo elegí, lo que pasa es que “el otro” me dejo un camino andado y otro por andar y yo no he tenido mas remedio que caminar siempre adelante, pero mirando sus huellas hacia atrás, para no tropezar con las mismas piedras con las que ya se habia tropezado el, y sin embargo vuelvo a caer al suelo.
Yo también, como tu busco alas. Yo también quiero volar y tomar una sobredosis de pastillas de ilusión, pero temo que mi mal ya no tiene remedio. Las heridas se han vuelto costras, las costras cicatrices, las cicatrices durezas y estas cayos que ya no me dejan sentir.
Soy como un muerto. Feliz día de los muertos Romina. Por favor celébrame con calaveras de dulce y que el ángel de Yde me cubra con sus alas.
Yo ya no creo en nada y quiero creer en algo, en lo que sea. En ti, pero no solo en ti, pero más que nada en ti.
Dios, yo ya no creo, pero como me gustaría creer.

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