Paris...

Desde hace ya algo más de una semana, mis días se desarrollan deambulando por Paris. De vez en cuando me siento, observo, converso y me codeo con gente nueva, a veces apática, a veces fría, pero la mayoría del tiempo alegres, sonrientes y acogedores.
Es cierto, estoy algo lejos de mi casa y he sobre exigido esfuerzo a mi ya cansado cuerpo, pero la oportunidad toca a la puerta solo una vez y tenia que aprovechar; después de todo las lucas no sobran y nadie me va a ir a dejar a la casa los 16.000 pesos diarios que estoy ganando vendiendo entradas para el partido Chile-Perú en Almacenes Paris Huechuraba, desde el 24 de septiembre y hasta el 17 de noviembre, si es que las entradas no se acaban antes.
Lo complicado a sido que estas ultimas semanas se me han puesto pesadas.
Recapitulando: trabaje desde el 14 al 22 de septiembre en el bar sin parar; descanse el 23, y el 24 ya estaba de nuevo en pie para comenzar en Almacenes Paris, donde no he parado desde ese día, y si sumamos a eso el cambio de casa, el proceso de “adaptación” y mi pega del Friend´s que no quiero ni puedo dejar... Uffff, así no hay cuerpecito que rinda.
Lo bueno, descubrí que trabajar en tienda me encanta, así como hacer algo que se que puedo hacer bien. Es sacrificado, es casi una hora de viaje de ida y una de vuelta, cuando tengo la suerte de que la locomoción este expedita, pero como dije, me gusta y hasta acá vale los sacrificios, tanto que ya me ofrecieron trabajo estable acá. La paga no es mucha, por no decir derechamente que es poca, pero me ofrece la opción de recuperar una vida normal, con fines de semana y noches libres y la posibilidad de dedicarme con más tiempo a mis nuevas prioridades, mi pareja y mi nueva casa...

Comentarios

mauro ha dicho que…
y ya volviste de Paris?
saludos
maurot

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