"Rabia" o "Carta a Luis"

Luis, siento que algo no esta bien y tengo miedo, no se si eres tu o soy yo, pero algo en mi cambio, estoy mal genio, enojado todo el día y peleamos por lo menos una vez al día por que yo reviento.
No se que es, se que no es falta de amor, ni siquiera de confianza, por que no se me pasa por la mente estar con otro o que tu lo estés, es miedo, un miedo inmenso de que tu no estés listo a adquirir todos los compromisos que yo quiero y que siento que necesito para tener una relación de pareja, que para ser honesto, no se diferencian, para mi, en nada de un matrimonio.
Me gustaría dejarte ser libre y darte la soltura para que pudieras hacer cada cosa que se te antoje cuando se te antoje, pero tú tienes una cualidad que me saca de quicio y me llena de temor, tu inpredecibilidad.
Me da miedo esa capacidad tuya de decir una cosa y luego hacer otra totalmente distinta, mal que mal tu conmigo sabes a lo que vas, que cosas me hacen feliz, que cosas me hacen reír, que cosas me hacen vibrar, gozar o enojar, en cambio contigo todo es un misterio… Siento que te debates entre tu necesidad de agradar a los demás y la de ser tu mismo, el problema es que al medio quedo yo, esperando tus decisiones y actos cuando se supone que todo estaba resuelto.
Amor, no me basta con que tenga claro lo que quiere, yo necesito mas, no basta con decir eres mi pareja y quiero que vivamos junto, necesito saber como piensas hacerlo y que es lo que esperas, el problema es que estas tan ocupado siempre que ya no tenemos tiempo mas que para organizar el día a día y decirnos cuanto nos amamos y nada mas…
Quieres que yo me sienta en mi casa?? Nada me gustaría mas, pero siento que tengo que pedir permiso siempre para hacer cualquier cosa, estoy solo acá y me siento ajeno y extraño, y es que tu casa solo es mi hogar cuando tu estas en el y lamentablemente, por cuestiones ajenas a nosotros, cuando yo estoy tu no estas…

Llamaste...

Entiende que si esta va a ser mi casa, nuestra casa, yo también quiero disponer de ella y no sentir que tengo que pedir permiso para todo y acomodarme a tus decisiones.
Estoy cansado Luis, súper cansado de ver que algo que tiene que ser tan fácil se complica y enreda en sus propias patas. Te aseguro que para mi sería mas fácil decir “Hasta aquí” y mandar todo a la punta del cerro, pero ni quiero ni lo voy a hacer, por que hice un compromiso contigo y quiero llevarlo hasta el final, sea cual sea ese.
Entiende que a mi no me molesta cocinar mientras tu haces el aseo o ir a la vega los sábados. A mi lo que me empelota es que tu estés tomando o en la disco mientras yo trabajo o en el gimnasio mientras yo te espero en la casa, por que lamentablemente yo no tengo la posibilidad de hacer esas cosas contigo y el tiempo que tengo libre lo sacrifico por estar contigo.
¿Tengo un genio de mierda?, si, es verdad, lo tengo, pero así y todo, te he respetado cada segundo de esta relación, he considerado lo que quieres antes de hacer cualquier cosa y me he puesto en segundo lugar cada vez que ha sido necesario.
Sabes perfectamente que cualquier cosa que tenga que ver con tu familia y tu trabajo o estudio la acepto, creo haber sido más que claro en ello, pero salvo esas excepciones yo no voy a aceptar estar después que nadie.
Creo que en esta relación he dado todo cuanto he podido y me has pedido, por eso mismo exijo lo mismo de ti. Si, exijo.
Yo no soy de conformarme con lo que me quieran dar. Yo quiero tenerlo todo y más, por que eso es que doy lo que doy y si doy un 100 %, espero lo mismo de ti. Si tu no puedes o no quieres seguirme el paso, mal por ti, por que yo se perfectamente lo que valgo y no estoy dispuesto a limosnear atención y a diferencia de ti, yo soy absolutamente predecible. Quieres que controle mi genio, pues fácil, no lo hagas explotar, por que de sobra sabes que cosas me molestan.
Me pediste que dejara de agarrar mis cosas y mandar todo a la mierda después de cada pelea, lo hice, el costo de eso es que ahora no me voy a ir hasta que tú lo digas. Pero si me pediste que me quedara, ahora me tienes que bancar con mis defectos y virtudes y cuando ya no puedas, dímelo que me voy, pero tenlo claro, una vez que me vaya no voy a volver.