Minimalismo:

El Sábado desperté descansado, animoso y resuelto, todo a mi alrededor parecía mejor, mas claro y brillante, de algún modo u otro me había sacado varias preocupaciones y pesos de encima en los últimos días y ahora solo quería “arreglar mis cajones”.
El sol entraba con fuerza por la ventana y de un salto me incorpore, mire a mí alrededor y vi todo lo que tenia que arreglar
Comencé con mis libros, discos y películas, seguí con mi cajonera, mi closet y termine con mi cabeza.
Los Chinos dicen que si tu mesa de noche esta desordenada, tu cabeza también lo esta y yo por mi parte siempre he pensado que si no se puede cambiar de adentro hacia fuera, hacerlo de afuera hacia adentro es una buena opción, después de todo, hay veces que cualquier cambio es bueno; con eso en mente, tire líneas, hice planes y me sentí feliz.
La idea general en estas últimas semanas es despojarme de todo lo superficial, de todo lo que se vuelva una carga, un peso o un mal rollo que no necesite; y vaya como ha servido.
Ese día partí botando papeles del velador, de mis carpetas, mis bolsos y mochilas viejas, y seguí regalando ropa que nunca use o no me voy a volver a poner. Resolví quedarme con lo fundamental, deshacerme de toda la carga extra, de todas las angustias y problemas.
La vida es simple, yo no, pero no vale de nada llorar sobre la leche derramada cuando tengo tanto por hacer. Hoy es el primer día dél resto de mi vida, mi vida comienza hoy

Comentarios

Entradas populares de este blog

La Blanca Navidad llega…

Berta

“Orgasmo” o “Fragmento de una conversación picara”