Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2006

No More.-

Imagen
Me canse de tomar. Me aburrí de la sensación de estar ebrio, misma que antes me fascinaba. El viernes, hace dos semanas, me fui con mis amigos de juerga a Av. Brasil, de ahí a otro local en Bellavista a esperar a la Srta. Balart y otras compañeras de trabajo que estaban en su despedida de soltera. Cuando llegaron el contraste fue tan grande… La Carola, el Jaime, el Ayala, la Mariana, la Chika y yo estábamos muy ebrios y torpes, ellas en cambio se veían alegres, pero compuestas y dignas. Fue tan fuerte el choc para mi que note que con mis amigos o al menos algunos de ellos solo me une la cerveza o el trago de después de la oficina y poco mas. Eso surtió más efecto en mis ganas de dejar de beber que la vez que quede bailando en bolas en una conocida discoteca santiaguina luego de haber perdido billetera, celular, suéter y camiseta. Siempre dije que era bebedor social, que tomaba por no irme a mi casa a ver tele, por reírme un rato con mis amigos. Bueno, ahora resulta que mis amigos, son

A raíz de lo que siento y escribí unos posteos atrás, creo ciertamente que esta será la última vez que hable de Gonzalo…

Imagen
A veces, cuado estas ahogado, la vida te supera y no tienes a quien aferrarte, vez una luz, una mano tendida y cuando la tomas y sueltas toda tu “triste historia” ansioso de cobijo, lo que te dan en la cara es un “Yo te lo dije” o un “Yo habría hecho esto… o esto otro…” Eso es lo bueno de Gonzalo, Gonzalo no me juzga, solo escucha y me entrega al ejercicio de resolver mis asuntos por mi mismo y de rascarme con mis propias uñas: _Gonzalo, me paso esto, esto y esto otro… _Ya, y crees que puedes hacer? _Bueno, tengo tres opciones, por un lado puedo… Por otro lado puedo… Y por ultimo puedo… _Ya. ¿Y cual crees tú que es tu mejor opción? Gonzalo, pese al poco tiempo que convivimos, fue, y es sin duda, quien mejor me conoce. Probablemente por eso, cada cierto tiempo, cuando me enredo con mi propia cola, experimento esa necesidad imperiosa de comunicarme con el, por que sea como sea que se haya portado conmigo, por mucho que me haya dolido tener que apartarme de él, por mucho que lo haya quer

Gran Verdad

Imagen
Ayer, mientras hablaba con mi amiga Macarena, después de fumarnos unos pitos y mientras veíamos un concierto de Rocío Durcal, (que freack,) ella comento algo que bien podría aplicarse a los gay: _"Tengo una teoría, me dijo, en el mundo hay cuatro clases de mujer: Las que buscan un hombre. Las viven para y por un hombre Las que desecharon a los hombres y... Las que no tienen mas remedio que recordar a los hombres".

"No eres tu, soy yo"

Imagen
Es raro, como muchas cosas en mi vida. Por fin lo había encontrado, era perfecto. Guapo, sin ser despampanante, inteligentísimo, varonil, culto, con buena situación. Él, el que había estado esperando y por el que había rogado tanto al cielo, llego. Creí que el universo me estaba recompensando por los intentos fallidos y que todo iba a ir perfecto, me equivoque… Ricardo (Richard) me mato la ilusión del enamoramiento, esa sensación de que iba a ir por la calle, a voltear la esquina y me encontraría con el amor de mi vida. Con ese fracaso aprendí que el amor ni es eterno, ni todo lo puede. Gonzalo (el señor Arcos) por otro lado, mato en mí las ganas de luchar, de pelear por el amor, de caer, levantarme y seguir adelante, de comprometerme hasta el final. Hoy solo quiero que todo se de fácil y bien. Ya no quiero pelear más. He descubierto que, de alguna manera, ese tonto aferramiento a los dos antes mentados, era mi forma de no desligarme del todo de esos ideales, un poco como si mi esperan

Robbie Williams

Imagen
No es mi intención hacer alarde. Anteayer fui al concierto de "Robbie Williams" y aunque no soy gran fanático de él, el estar ahí anoche fue una de las cosas mas emocionantes que he sentido.

Yo.-

Imagen
Era tarde, el asado terminaba y Fernando estaba cansadísimo después de tantísima cueca. _Mauro ¿Tu manejas? _ ¿El Mauro? El Mauro no maneja ni su vida. Ja, ja, ja, ja. Esa inocente broma de amigos encerraba una verdad única. Mi vida es y siempre ha sido un desastre. Muchas cosas empezadas, ninguna terminada, todo un lío y desorden. Mi vida es como la cama al despertar un domingo en la mañana: enmarañada, desordenada, pero tan cómoda y calentita que no dan ganas de cambiarla por la caminata en el parque ni por el mejor de los panoramas. Mis relaciones, sean de la índole que sean, parecen jamás terminar del todo, todo es cíclico y siempre vuelve, paso por periodos de extroversión, de introversión, de carrete desmedido, de mesura concienzuda, de promiscuidad, de castidad, de ansiedad, de apatía, de interés y desinterés, de amor y desamor… mis ex (amigas(os), pololas(os), amantes o lo que sean) suelen perderse y aparecer en mi vida como las olas en la orilla del mar. Jamás finiquito del to